Hoy me quede en casa, y me di cuenta de que no he
superado mis miedos, la gente me gusta, adoro conversar con todo tipo de
personas desde la mas arrogante a la más humilde, pero mi cerebro funciona de
una forma muy estructurada, no es flexible ante nada, por ejemplo al darse
cuenta de la traición se cierra al perdón, no tolera muchas cosas, pero a pesar
de toda esa función es temerosa de sí misma.
Me gustaría poder ser yo misma, no quiero seguir los
ritos de las personas quiero un nuevo camino, en donde el sol es tibio, y
puedes sentir el ruido de las olas, y el viento juega con tu pelo sin cansarse
en ningún momento, donde las palabras puedan salir, pero para obtener eso debo
seguir el rito de la sociedad, y debo hacerlo para poder concentrarme en
encontrar la puerta de mi verdad y seguir a esa luz que me rodea, necesito
poder sacar mis pies del cemento.
Y a pesar de mis 23 años sigo teniendo la mente en otro
lado, en otro espacio de este mundo, aquel mundo que nos pertenece pero que
olvidamos, porque nos tenemos que centrar en sobrevivir a una vida que muchas
veces sentimos pero no la disfrutamos… Quiero paz.
Hoy en día estoy sumamente preocupada, no sé si mis planes
funcionaran, o si todo demorara, no quiero volverme esclava de la sociedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario